Los estilistas son pa’putos

El otro día me encontraba en una comida con pura gente bonita, de esa con la que me junto yo. Todo transcurría con normalidad: las viejas con sus escotadas blusas alegaban fuertemente acerca de cualquier cosa de esas que alegan las viejas con blusas escotadas (después de todo, lo único que importa es que llevaban blusas escotadas), algunos güeyes que se creían muy galanes, muy adinerados y muy decentes tomaban de sus limonadas (sí, limonadas, por alguna razón creyeron que como ninguna vieja pidió bebida alcohólica ellos se verían mal si lo hacían, yo muy fino, por supuesto, pedí mi cheve León y estuve chupando solo hasta que de rato se apareció el viejo conocido borracho Zanatta por esos lares y nos chingamos más cheves).

Como dije, todo transcurría con normalidad, hasta que súbitamente dos de esos jóvenes decentes que enuncié comenzaron a discutir a cerca de… estilistas.

Sujeto 1: ¿con cuál vas tú?
Sujeto 2: con Iván, uno que está por la cruz. ¿Tú?
Sujeto 1: no pos con uno del centro, cerca de Ezequiel Montes.
Mulder: y de seguro los dos son putos (yo me refería a ellos, no a los estilistas).
Sujeto 2: jajaja, el mío sí, ¿el tuyo?
Sujeto 1: ahh jajaja, pos el mío también. ¿Cuánto te cobra?
Sujeto 2: pos la última vez me cobró $200, ¿y a ti?
Sujeto 1: a mí me cobró $230 ¡y que buen masaje me dio!

No mames, casi se me sale por la nariz lo que estaba tomando, de no ser porque era cerveza y la cerveza no se desperdicia. ¡¡¡¿Más de $200 por que te den unos pinches tijeretazos culeros?!!! Verga. Y yo que una vez la andaba haciendo de pedo porque me cobraron $70.

Peluquero: listo joven.
Mulder: eso es todo, ¿cuánto va a ser?
Peluquero: $70 varitos nomás.
Mulder: ¡¡¿nomás?!!, chiiiiiiiiinga tu madre, ¿70 varos?, ¿y todavía tienes el descaro de decir nomás?, a la verga, devuélveme mi cabello, ya no quiero nada. ¡Gulp!, esteeee, sí, aquí tiene.

En mi puta vida me volví a parar ahí. Lo normal es que le cobren a uno entre $30 (en algunos lugares del centro) y $50 (ya más cerca de mi casa). ¿Estilistas?, ¡huevos!, los auténticos peluqueros deben de ser dones bigototes de más de 50 años que te cortan el cabello en chinga, sin necesidad de andar usando peinecitos y pincitas para no irse chuecos mientras hablan de fut y de lo buenota que está la Niurka.

En el caso de las mujeres entiendo un poco más el hecho de que vayan con “estilistas”, por “norma social” deben de arreglarse más, y por fisonomía, su cabello se presta más para que les hagan pendejaditas. Pero que lleguen a pagar más de $1000 (poco menos de $100 dólares) por una sola ida que incluye un corte y que les pintan dos pelitos por aquí y tres por allá de otro color, no mameeeeeen. Y bueno, si fueran una vez al año no habría tanto pedo, pero joder, van cada mes. Quizá si se pusieran a analizar las cosas descubrirían que con lo que se gastan en año y medio en “estilistas” podrían hacerse una cirugía plástica y pinche problema solucionado de por vida.

Pero no, les gusta estar “cambiando constantemente”. Y no conformes con eso, lo quieren convencer a uno:

Amiga: deberías de ir a que un estilista te haga un corte padre.
Mulder: ¡huevos!, mi cabello está poca madre como está.
Amiga: pues sí, pero tienes que ser vanidoso.
Mulder: pues yo ya soy un poco vanidoso y con eso basta, no quiero ser un puto metrosexual.
Amiga: pero no manches, con $180 la haces, no es tan caro.
Mulder: ¡¡¿$180?!!, no mames, mejor me los chupo.
Amiga: ay, un fin de semana que no tomes.
Mulder: un fin de semana desperdiciado.
Amiga: mira que borrachito me saliste.
Mulder: borracho pero no pendejo.

Así que ya dije, el que pague más de $50, digo de $70 varos por un corte es PUTOOOOOO.

Conclusión: los estilistas son pa’putos.

Nota aclaratoria para los putos: nadie en elmulder.blogspot.com tiene algo contra los putos, es sólo que son… pues… putos.